Un servidor web compartido es un tipo de alojamiento donde múltiples sitios web comparten los recursos de un mismo servidor físico. Este tipo de hosting es una solución económica y práctica, ideal para pequeñas y medianas empresas o proyectos personales que no requieren una gran cantidad de recursos.

¿Cómo Funciona un Servidor Web Compartido?

En un servidor compartido, cada sitio web tiene su propio espacio asignado, pero utiliza los mismos recursos del servidor, como CPU, memoria RAM y almacenamiento. El proveedor del hosting se encarga de gestionar el mantenimiento, la seguridad y la configuración del servidor, lo que lo hace fácil de usar para los clientes.

Ventajas de un Servidor Web Compartido

• Costo Asequible: Es la opción de hosting más económica, ya que los costos se distribuyen entre los usuarios.
• Simplicidad: Incluye herramientas como cPanel o Plesk que facilitan la administración del sitio web.
• Mantenimiento Gestionado: El proveedor maneja actualizaciones, parches de seguridad y soporte técnico.

Limitaciones de un Servidor Compartido

• Recursos Limitados: Compartir recursos puede afectar el rendimiento si otros sitios consumen demasiada capacidad.
• Menor Flexibilidad: No permite configuraciones avanzadas como en un servidor VPS o dedicado.
• Seguridad: Aunque se implementan medidas de protección, los riesgos pueden aumentar al compartir el servidor.

¿Es el Servidor Compartido la Mejor Opción para Ti?

Si tienes un sitio web con tráfico bajo a moderado, como un blog personal o una página corporativa pequeña, un servidor web compartido es una excelente elección. Sin embargo, si planeas manejar grandes volúmenes de tráfico o ejecutar aplicaciones complejas, considera opciones más robustas como VPS o servidores dedicados.